JAVIER SOLANO
Comentarista del Encierro de Pamplona
JAVIER SOLANO
Comentarista del Encierro de Pamplona
PRESENTACIÓN
El veterano periodista de Televisión Española, Javier Solano, está considerado como uno de los máximos expertos internacionales en el encierro de Pamplona.
Gran parte de su vida profesional en los medios de comunicación –sobre todo en televisión- la ha dedicado a analizar, describir, divulgar y narrar esta peculiar carrera de mozos y toros que ha proporcionado fama mundial a Pamplona. Su larga experiencia periodística en este campo se plasma en cientos de artículos de opinión e informaciones acerca del encierro pamplonés en periódicos y revistas, medios electrónicos e internet y, también, como autor de varios libros sobre el encierro.
Por otro lado, es conferenciante habitual sobre el encierro a lo largo de toda la geografía española, con incursiones en el ámbito internacional (Francia, Argentina y Estados Unidos).
Esta dilatada trayectoria como comunicador especializado en esta singular carrera, tanto en los campos oral, como escrito y audiovisual, la viene ejerciendo, además de en los medios informativos, de forma personal. Asi, Javier Solano ofrece todo tipo de servicios relacionados con el encierro por medio de charlas, mesas redondas, conferencias, publicaciones, presentaciones públicas y recorridos turísticos guiados por las calles del trayecto del encierro pamplonés.
Encierros Comentados
Años en Televisión
Guias Realizadas
Charlas y Conferencias
SERVICIOS
SERVICIOS COMPLEMENTARIOS
- Una o varias paradas gastronómicas, en alguno de los numerosos establecimientos hosteleros de la calle Estafeta para degustar los famosos «pinchos» pamploneses.
- Una comida o cena con el guía.
- Entrega a los visitantes de recuerdos de Pamplona y/o de las fiestas de San Fermín.
- Obsequio a los invitados de uno o varios libros sobre el encierro de Pamplona firmados y dedicados por su autor.
- Local cerrado alternativo con proyección de imágenes para casos de mal tiempo.
Solicite presupuesto sin compromiso, o cualquier aclaración que desee:
BIOGRAFÍA
Vinculado al encierro de Pamplona desde los 15 años, primero como corredor, y después como periodista especializado en él.
Autor del libro “El encierro de Pamplona”. 1995. Editorial Elkar, San Sebastian. Autor de los textos sobre el encierro del libro fotográfico sobre los Sanfermines de Jim Hollander, “Running to the sun”; (ediciones en castellano e inglés). Autor del libro –en dos tomos- “25 años de encierros en Pamplona”. 2004-2005.
Autor de decenas de artículos sobre el encierro de Pamplona en la prensa local, nacional e Internacional (desde 1982 hasta la actualidad).
Sujeto de entrevistas sobre el encierro: radio (Cadena SER, Radio Nacional, COPE, Onda Cero, Cadena 100, Radio Rosario en Argentina), Televisión (France 3, Nipon Televisión, CBS, CNN), Prensa (Diario de Navarra, Diario de Noticias, El Correo, El País, USA Today, New York Times).
Cronista de los encierros entre 1982 y 1985 en el periodico ”Navarra Hoy”.
Responsable de los coloquios “El encierro del día” en el Hotel Maisonnave de Pamplona, desde 1996 hasta la actualidad (en castellano y en inglés).
Presidente de la “Fundación Museo del Encierro de Pamplona” (desde 1998 hasta hoy).
Jurado de los premios a la mejor ganadería de los encierros del Club Taurino de Pamplona.
Guionista de la película sobre el encierro de Pamplona “Jugando a no morir” (1986).
Autor de los textos del CD Rom “El encierro algo más que una carrera”. 1.999
Ponente en las II Jornadas sobre el Ganado de Lidia de la Universidad Pública de Navarra, y coautor del correspondiente libro resumen de las mismas.
Conferenciante sobre el encierro en:
Las peñas pamplonesas, Universidad de Navarra, Palacio de Congresos Baluarte, Escuela de verano Navarro-Argentina, Centros culturales del Ayuntamiento de Pamplona
Sangüesa, Peralta, Funes, Bargota (Navarra)
Centro Navarro de Rosario (Argentina)
Escuela Diplomática del Departamento de Estado norteamericano (Washington)
Euskal Etxea (Barcelona)
Ayuntamientos de Beziers y Guetary (Francia)
Cuellar, Benavente, Medina del Campo y Valladolid (Castilla-León)
Rincón de Soto, Arnedo, Alfaro y Santo Domingo de la Calzada (La Rioja)
Ampuero (Cantabria)
San Sebastián de los Reyes (Madrid)
Los Barrios y Algeciras (Cádiz)
Segorbe, Onda, Puzol y Valencia (Comunidad Valenciana)
Trillo (Castilla-La Mancha)
Asesor de la empresa “El Pamplonica” para sus homenajes sanfermineros anuales y del Casino Principal de Pamplona en el mismo ámbito.
Responsable y comentarista de la retransmisión en directo del chupinazo y encierros Sanfermineros desde 1988, a través de la primera cadena de Televisión Española y el canal Internacional de TVE.
Premiado tres veces en el Concurso Periodístico Internacional “San Fermin” (especialidad prensa en 1984, y especialidad televisión en 1988 y 1991).
PUBLICACIONES
Javier Solano. Extracto del prólogo del libro "Run to the sun":
«Son las ocho de la mañana del siete de Julio, y en la calle se respira miedo; miedo humano, comprensible y controlable gracias a la voluntad, pero miedo al fin y al cabo, miedo que atenaza los músculos, seca la boca y comprime el estómago. Miles de personas han desafiado al sueño y al cansancio sanfermineros para agolparse en los tendidos de la plaza de toros, tras los vallados de las bocacalles y en los balcones de las altas y viejas fachadas de tres calles y una plaza. De repente, el sonido de un cohete rompe los murmullos y todas las miradas giran en la misma dirección. Todos, espectadores y corredores, estiran el cuello para escudriñar el movimiento de un horizonte de cabezas que dan pequeños saltos. En la distancia, esa marea de cabezas comienza a moverse cada vez con más rapidez. Poco a poco, la masa compacta de mozos alcanza más y más velocidad, y empiezan a adivinarse las primeras astas sobresaliendo de unas manchas negras que se abren paso por entre la homogeneidad de un gentío casi unánimemente vestido de blanco y rojo.
Un instante después, una manada de astados “vuela” sobre los centenarios adoquines rodeada por completo por unos veloces corredores que se sitúan a escasísima distancia de esos animales totémicos que son los toros. La carrera, plástica y colorista, es muy rápida. Unas veces presenta episodios violentos y otras adquiere la armonía de un ballet. Unos segundos después, toros y mozos se desvanecen de nuevo en la distancia, y la emoción vivida y las sensaciones contenidas se diluyen otra vez en una marea de cabezas lejanas. Otro cohete, disparado tres minutos después del primero, marca el final del efímero y potencialmente dramático espectáculo. El encierro, esa carrera anónima, gratuita, libre e inútil, ha terminado. Los toros -bóvidos reverenciados por los pamploneses- ya no están en la calle, y aunque el fantasma de la tragedia se despide hasta el día siguiente a la misma hora, la intensidad de unos breves momentos, la emoción que hace gritar, el riesgo de jugar con la muerte y la explosión de sonidos, imágenes y colores experimentada por espectadores y corredores quedará grabada para siempre en sus retinas.
El encierro es una carrera grupal y no individualista que cuenta con su propia liturgia, pues como todo acto viejo y ritual sirve para afianzar la identidad colectiva, en este caso la de los pamploneses, mediante celebraciones cíclicas. En él, se escenifica la antigua lucha, ya presente en la Creta clásica, entre el hombre y la representación del Dios mitológico; porque el toro hace ya cuatro mil años era la personificación de la fuerza, la virilidad, la agilidad, la nobleza y la belleza, es decir, la personificación del Dios. Por eso, luchar –y vencer al toro- era entonces, y lo es hoy en día también en Pamplona, enfrentarse al Dios, luchar contra el fuerte desde la debilidad humana, combatir y ganar al símbolo de la lucha sin descanso, de la pelea hasta la muerte, y de la negativa a rendirse o huir. Es por ello por lo que el corredor en lugar de escapar presa de un pánico descontrolado en un aparente “sálvese quien pueda”, pugna por acercarse lo más posible a los astados, despreciando el riesgo y jugándose la vida gratuitamente al retar a ese animal mucho más poderoso que el hombre. Por eso, no es de extrañar la irracionalidad primitiva, la locura colectiva y la exaltación del valor que definen a esa anarquía organizada que es el encierro.»